Nunca me ha interesado la cocina, solo sé lo básico para subsistir. Sin embargo, soy una golosa empedernida y siempre he tenido la espinita de adentrarme más en el mundo de la repostería. El día de mi aventura en la cocina llegó el día que tuve este libro de Marian Keyes en mis manos. Y es que solo una de mis autoras favoritas podía obrar el milagro de mi entrada en el mundo de la repostería.
Como muchos de vosotros sabéis, Marian Keyes es una famosa escritora de libros chick-lit. El caso es que hace unos años, Marian pasó por una depresión que hizo que perdiera las ganas de seguir escribiendo. Fue una experiencia muy dura que ella misma nos cuenta en la introducción de este libro. El hecho de tener un nuevo hobby y de volcarse totalmente en él, la ayudó a mejorar su estado anímico. Y ese hobby fue la creación de todo tipo de postres que ahora recopila en este libro de recetas.
Salvada por los pasteles empieza explicándonos cuáles son los utensilios básicos con los que vamos a cocinar, nos da una serie de técnicas y consejos para defendernos como mejor podamos en la cocina y finalmente pasamos a las recetas, a cada cual más sabrosa.
El libro está dividido en varias secciones como: Los Clásicos, Cupcakes, Pasteles de queso, Bizcochos con líquido, Tartas y masas varias, Merengues y macarons (con los cuáles todavía no me atrevo), Galletas, Frutas y verduras y Chocolate.
Yo he hecho prácticamente todas las recetas de la sección de Cupcakes y os animo a hacerlos si sois unos novatillos como yo, porque realmente son muy fáciles de hacer. También me he atrevido a aventurarme con las galletas y son más fáciles de lo que parecen. Es cuestión de echarle horas más que de dificultad. La masa es muy sencillita de hacer, pero cortar con los moldes y la decoración es un poco más trabajoso. Sobre todo porque parecía que la masa era interminable y las galletas se multiplicaban por sí solas.
Hay recetas de todo tipo en este libro. Hay algunas muy facilitas y otras más difíciles, pero todas están bien explicadas. Además en cada una de ellas Marian nos cuenta su experiencia y lo hace siempre con sentido del humor, advirtiéndonos también de lo que puede salir mal.
El único problema que le he visto al libro es que se nota que la autora es extranjera y algunos ingredientes que nombra no resultan fáciles de conseguir por aquí. De todas formas esto pasa poco y Marian Keyes siempre intenta dar varias alternativas a un determinado ingrediente un tanto peculiar.
Yo como os he dicho, me he aventurado a hacer varias de las recetas que nos cuenta Marian y como primeriza que soy en esto de los postres, algunas han sido un total fracaso, pero por mi culpa y la de mi horno, obviamente. Cuando empecé a hacer bizcochos, a mi fantástico horno solo le daba la gana de subirlo por un solo lado, por lo que al final, más que un bizcocho parecía una montaña deforme. La primera vez que hice un cupcake me quedé sin mantequilla y tuve que hacer la crema con una que llevaba un tiempo sospechosamente largo en la nevera, así que por más que puse aromatizante de vainilla, eso seguía sabiendo a mantequilla. Mi padre se los comió por pena, aunque él sigue diciendo que estaban muy buenos. Pobre.
En fin, las primeras recetas fueron un poco desastre. Y en lo que se refiere a la decoración... ppf mejor ni hablamos, porque nunca ha sido mi fuerte. De todas formas, poco a poco he ido mejorando y aunque nunca voy a ser una repostera profesional, algunos de mis postres son comestibles.
Ahora es el momento en que me armo de valor y os muestro algunas de mis creaciones. La diferencia entre los de Marian y los míos es bastante clara, pero que no se diga que no lo intento:
Estos cupcakes de chocolate con pepitas de chocolate estaban para chuparse los dedos. El problema fue que la crema por algún motivo desconocido, nunca llegó a endurecerse lo suficiente, así que te tenías que chupar los dedos de verdad porque te pringabas todo al comerte uno, pero estaban muy buenos.
Galletas con forma de animales porque donde fui a comprar los moldes solo les quedaban de animales de la granja, así que me tuve que contentar con ellos. Se nota mi apatía con la decoración, pero es que como dije no paraban de salir galletas de la masa y me cansé. Afortunadamente fueron un éxito porque no duraron mucho en mi casa.
Pastel de queso y chocolate "Agujero Negro". Estaba más bueno de lo que aparenta por la foto. Lo juro.
Espero haberos abierto el apetito, aunque solo sea un poco.
18 comentarios:
Joe pues tus cupcakes de choicolate y este último pastel les hincaba yo el diente toda contenta jaja
Yo no creo que me anime con el libro porque un año me dio pro coleccionar recetas...y tengo muchas jeje. Pero el otro día me dio por hacer magdalenas rellenas por primera vez y me salieron muy buenas...seguramente este finde haga de nuevo- Pero estéticamente no me quedan tan chulas jeje
Un beso!
Nunca salen idénticos a como los muestran en el libro pero está genial cuando a pesar de no parecerse demasiado a como deberían ser son comestibles y es más están buenos. ME fije en el libro hace tiempo pero como mi madre está a dieta pensé en no comprarlo para no hacerla caer en la tentación.
Me gusta mucho la repostería y este es un libro al que le tengo echado el ojo por ese motivo. A ver si algún alma caritativa tiene a bien regalármelo, jejeje! 1beso!
Bueno, bueno, no están mal tus pinitos. Vaya pinta ese libroooo!!! :-D
ahhh que pinta las galletas.. yo estoy por hacerlas (por si me das receta jaja)
que rico, ademas se ve bien para hacer con niños, aunque luego no lleguen a la mesa,jaja.
Un besazo!!
Jajaja, no está nada mal y con el hambre que tengo a estas horas no me importaría hacerle los honores a esas creaciones.
Besos
Yo soy una negada para la cocina, pero me apetece muucho ponerme a hacer repostería. Y este libro me encantaría tenerlo. Tiene una edición muy bonita!
Que buena pinta.
Me ha encantado la reseña, el libro le tengo el ojo echado, como tú, soy una golosa empedernida!!! :) así que caigo en estas tentaciones, todo es empezar y practicar. Con las galletas yo también he tenido mis malas experiencias XDDD
Besos
Por suerte tengo por marido a un gran cocinero y que es mi mejor libro de cocina, pero aún así me ha gustado el libro y lo tendré en cuenta.
Un beso.
Qué buena pinta tiene todo! yo no soy mucho de cocina y de repostería menos, aunque siempre me da envidia cuando veo lo que hacéis
besos
Me alegro de que un libro te haya animado a aventurarte en la repostería. No sé si será la suerte del novato, pero yo veo muy bien todo lo que has hecho.
Jolin, tengo hambre y me ha entrado aún más tras ver esas fotos. Confieso que no me atrae nada el mundo de la cocina, pero si me diera por hacer cocinitas, sé que me decantaría por la repostería.
Besos.
Que bueno que te hayas animado a incluir algunas fotos de tus creaciones :) pues no está nada mal oye.
Por mi parte, me gusta muchísimo hacer pasteles pero con los cupcakes, aunque se llevan mucho, aún no he probado.
Yo no me animé aún a comprarlo por lo de los ingredientes guiris... pero bueno... aún así ya veo que tampoco es un problema para todas las recetas... así que algún día caerá porque es una cucada.
Besitos y que vaya todo bien con lo siguiente que hagas ;)
A este libro le tengo echado el ojito, que me gusta meterme en la cocina y hacer dulces. Lo curioso es que luego no como nada, porque no me gustan los dulces. Pero la familia sí que lo devora todo.
Besotes!!!
No cocino demasiado, pero me gusta dedicarme a los postres durante el fin de semana. En todo caso, lo que nos presentas aquí me parece demasiado elaborado para mí modestos dotes culinarios; eso sí, tienen un pinta muy buena. Buen fin de semana,
A mí también me ha encantado el libro. Y también he hecho la tarta agujero negro (aunque no vino Carl Sagan a grabar un documental a mi casa, me cachis!! jajaja).
Tengo que seguir haciendo recetas de Marian, que además lo cuenta todo con una gracia que me encanta!
Lo tengo pendiente de leer, ya que es el único que me falta de leer de Marina Leyes.
Me encanta tu blog, te sigo , mil besos Cris
www.nosinmilibro1.com
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